La OMS presenta un marco estratégico para mejorar la prevención y el control de la viruela símica
La viruela símica sigue afectando a personas de todo el mundo. La OMS ha presentado hoy un nuevo marco (en inglés) que servirá de guía a las autoridades de la salud, las comunidades y otras partes interesadas para prevenir y controlar los brotes de viruela símica, eliminar la transmisión de la enfermedad de persona a persona y reducir la transmisión zoonótica del virus.
La viruela símica es una enfermedad causada por el virus de la viruela símica, y puede provocar una erupción dolorosa, inflamación de los ganglios linfáticos y fiebre. La mayoría de las personas se recuperan totalmente, pero algunas enferman gravemente. El virus se transmite de persona a persona a través del contacto directo, incluido el sexual. También tiene reservorios de animales en África Oriental, Central y Occidental, donde ocasionalmente pueden producirse transmisiones de animales a humanos, lo que da lugar a nuevos brotes.
Existen dos clados distintos del virus: el I y el II. Los brotes del clado I tienen más potencial mortífero que los del clado II.
En 2017 se produjo un fuerte surgimiento de la viruela símica vinculada al clado II, y desde 2022 se ha extendido a todas las regiones del mundo. Entre julio de 2022 y mayo de 2023, el brote fue declarado emergencia de salud pública de importancia internacional. Aunque ese brote ha remitido en gran medida, actualmente se siguen notificando casos y fallecimientos, lo que pone de manifiesto la continuidad en todo el mundo de una transmisión de baja intensidad.
En la actualidad, también existe un brote importante del virus del clado I en la República Democrática del Congo, donde durante décadas ha ido aumentando el número de casos. Desde principios de año en ese país se han notificado más de 6500 casos y 345 muertes. Casi la mitad corresponden a niños menores de 15 años.
El Marco Estratégico para Mejorar la Prevención y el Control de la Viruela Símica (2024-2027) (en inglés) proporciona una hoja de ruta a las autoridades de la salud, las comunidades y las partes interesadas de todo el mundo para controlar los brotes de esta enfermedad en todos los contextos, avanzar en la investigación de la viruela símica y en el acceso a las contramedidas, y minimizar la transmisión zoonótica