Los primeros son cocodrilos cavernícolas ya que viven en cuevas al sur de Gabón, África. Su pigmentación anaranjada en partes de su piel se debe a la orina de los murciélagos que coexisten con ellos allí y que daña su piel.

En el caso de los cocodrilos de Nepal, su tono naranja es debido a la gran cantidad de hierro que hay en el agua donde habitan produciéndose una reacción con el oxígeno.