A qué muchachos los de ahora...🤷🏻‍♂️

Un adolescente de 17 años se metió un cable de 20 centímetros en el pene, con el objetivo de obtener mayor placer, pero el cable se le atoró y lo operaron.

De acuerdo con el caso expreso por la revista Psychiatry Research Case Reports, un adolescente de 17 años tuvo que ser sometido a un procedimiento quirúrgico, luego de que se metió un cable de 20 centímetros en el pene.

El menor estaba intentando intensificar la sensación de sus orgasmos a la hora de autocomplacerse, por lo que se metió un cable eléctrico por la uretra, pero se quedó atorado en su pene.

Esto le provocó molestias al orinar y fue hasta nueve días después, cuando acudió a un médico, pues comenzó a sufrir un intenso dolor abdominal y luego de una ecografía, los doctores pudieron ver el cable atorado en su pene.

Luego de realizar este procedimiento y de retirarle el cable, el menor fue diagnosticado con PEKemania, un trastorno en el que las personas obtienen placer por insertar objetos extraños en los orificios de su cuerpo, con la intención de llegar al orgasmo.

Esto luego de que el adolescente revelara que no podía controlar sus impulsos para autocomplacerse y que tenía este tipo de comportamientos unas tres veces al día.

Por lo que lo mandaron con un psicólogo, con la intención de ayudarlo a reducir sus impulsos y le recetaron medicamentos.

Asimismo, los médicos indicaron que no sufrió consecuencias a causa de haberse metido un cable de 20 centímetros en el pene.