Melissa Calderón Ojeda, mejor conocida como ‘La China’, se perfilaba como una lideresa criminal dispuesta a enfrentar a los más altos mandos del Cártel de Sinaloa, pero fue traicionada por quien menos lo esperaba.
La información disponible refiere que inició su trayectoria criminal en 2005 y, sin tener un vínculo familiar con ningún jefe de la organización, ascendió rápidamente. Para 2008 ya era jefa del grupo conocido como Las Fuerzas Especiales de Los Dámaso, brazo armado encabezado por Dámaso López Núñez, ‘El Licenciado’ y su hijo Dámaso López Serrano, ‘El Mini Lic’.
Al frente de este comando de sicarios, ‘La China’ mantuvo el control de los destinos turísticos de La Paz y Los Cabos, en Baja California Sur.
Reportes compartidos por The Daily Beast refieren que Calderón Ojeda entró al mundo criminal a los 20 años por influencia de su pareja de ese entonces, Erick Dávalos Von Borstel, cuyo apellido estaba tatuado en el brazo izquierdo de ‘La China’.
En 2014, ‘La China’ se rebeló al ‘Chapo’ Guzmán y los Dámaso luego de que intentaran quitarle su liderazgo como sicaria para que Abel Quintero, alias ‘El Grande’, tomara su lugar.
La furia de Calderón Ojeda creció cuando supo que, además de relevarla, Quintero ordenó el asesinato de Von Borstel. Fue en ese momento que decidió formar su propio grupo armado.
Con 300 sicarios bajo su mando, ‘La China’ desató una ola de violencia en La Paz en contra de sus enemigos, incluyendo el brazo armado de Los Ántrax. El reto al Cártel de Sinaloa fue mayor cuando amenazó con aliarse con Los Zetas en la disputa por la plaza.
En el paraíso turístico de Baja California Sur comenzaron a ser comunes las ejecuciones, lo que puso a ‘La China’ en la mira. Algunos informen detallan que esta lideresa criminal estaría detrás de más de 150 asesinatos.
Inició una relación sentimental con Pedro Héctor Gómez Camarena, alias ‘El Chino’, lo que eventualmente provocó su caída. Las autoridades lo capturaron en julio de 2015 y, como segundo al mando del grupo de ‘La China’, tenía información privilegiada en su poder.
Gómez Camarena no dudó en delatar a su pareja a cambio de reducir la pena que pudieran dictar en su contra. Les confesó los crímenes que cometía y les dio la ubicación de varias fosas clandestinas.
Una investigación de Zeta Tijuana expone que ‘La China’ pudo escapar de la justicia en seis ocasiones, pero en septiembre de 2015 no pudo repetir la “hazaña”. El día 19 de aquel mes, mientras estaba en la sala de espera de un aeródromo en Cabo San Lucas para volar a Estados Unidos, un escuadrón de agentes de investigación la detuvo.
Con sólo una orden de aprehensión por el delito de homicidio, ‘La China’ quedó en manos de los oficiales. No puso resistencia alguna, pues aquel día no iba acompañada de su nutrido grupo de pistoleros.
Fue ingresada al Centro de Reinserción Social (Cereso) Femenil de La Paz y el 23 de marzo de 2016 la enviaron al Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) Femenil Número 16, en Morelos. En enero de 2017, Calderón obtuvo un amparo para que la regresaran a La Paz, pues su traslado a Morelos ocurrió en condiciones violatorias a sus derechos.
Las versiones sobre la sentencia dictada en su contra difieren entre sí, pues algunos reportes señalan que fue condenada a 11 años de prisión, pero la periodista Deborah Bonello, quien trató de contactarla sin éxito, refiere que ‘La China’ habría recibido cadena perpetua, según puede leerse en su libro Narcas: the secret rise of women in Latin America’s cartels.