El nacimiento de una criatura extraña en una granja ubicada de Tailandia ocasionó momentos de angustia y pánico en una pequeña población. Se trata de una mutación de bovino que según los testigos poseía “cabeza humana”.

Sin embargo, el espécimen no sobrevivió por mucho tiempo. Mientras que, las especulaciones de los habitantes se produjeron inmediatamente asegurando que era producto de la bestialidad.

Por su parte, los científicos desmintieron los rumores asegurando que es imposible que el ADN humano origine descendencia con los bovinos.
La ola de conjeturas prosiguió a pesar de la aclaratoria de los científicos. “Tengo que preguntar: ¿alguien jugueteó con una vaca?”, manifestó un lugareño.

"Hay muchas personas que creen esto porque leen demasiadas tonterías", expresó Nimit. Otra lugareño aseguró que "Por eso dicen que la educación es muy importante".